Según el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA), el 54.9% de la población en Argentina es pobre y el 20.3% es indigente en el primer trimestre de 2024, basado en los microdatos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC. Estos números son ligeramente diferentes de los obtenidos por el Observatorio en el período de abril-mayo, que estimaron la pobreza en un 55.5% y la indigencia en un 18.5%.
Gran Resistencia, Chaco, es la región más afectada con un 79.5% de pobreza y un 38.6% de indigencia. Formosa le sigue con un 72% de pobres y Santiago del Estero-La Banda con casi un 30% de indigentes. En el Conurbano Bonaerense, las tasas de pobreza e indigencia son del 62% y 25%, respectivamente.
Agustín Salvia, director del ODSA, señaló que la recesión desde diciembre de 2023, junto con la reducción del consumo, ha afectado gravemente la demanda de bienes y servicios, especialmente en el sector informal, lo que ha llevado a un aumento en la pobreza y la indigencia entre los trabajadores autónomos y asalariados formales, así como entre los jubilados y pensionados.
Además, se destaca que siete de cada diez niños en Argentina viven en hogares pobres.