La cumbre de intendentes que se llevó a cabo en Almirante Brown fue una reacción a la propuesta del gobierno nacional, encabezado por el ministro de Economía, Luis Caputo, de prohibir el cobro de tasas municipales a través de las facturas de servicios públicos como electricidad y gas. Esta práctica, común en varios municipios, les permite a los intendentes asegurar el cobro de tasas ante la morosidad de algunos contribuyentes
La posible resolución que prepara el gobierno nacional busca limitar este mecanismo, argumentando que, además de tener un fin recaudatorio, también tiene una finalidad política que obstruye los objetivos económicos del actual gobierno. Caputo calificó este cobro como un aumento «escondido» en las facturas de servicios, lo que generó fuertes reacciones.
Durante la reunión en el sur del conurbano, varios intendentes expresaron su preocupación por el impacto que la medida tendría en sus distritos, mientras que en el norte del conurbano se espera una reunión similar. La discusión no solo involucra a los municipios del conurbano bonaerense, sino también a los del interior de la provincia, donde algunos intendentes, en particular aquellos alineados con el PRO, ya están adoptando políticas para reducir o eliminar las tasas municipales.
El debate sobre el cobro de tasas municipales en las facturas de servicios es relevante, especialmente en un contexto económico donde los costos adicionales en los servicios pueden generar un impacto negativo tanto en los consumidores como en sectores como el comercio, representado por los supermercados, que han denunciado un aumento en las tasas municipales.